El nombre, es el homenaje al abuelo de los hermanos Peique, quien les enseñó a entender y amar la viticultura. Por esa razón en esta botella hay mucho más que mosto de mencía fermentado y reposado en barrica.
Boscoso, elegante y perfumado, es un vino para todos los días y para todas las ocasiones. Así lo hubiera querido Ramón 👇🏼