- Bodega: Bodega de Forlong
- D.O./Origen: V.T. Cádiz
- Variedad: 100% Cabernet Sauvignon vendimiada a mano con selección en la propia planta buscando la madurez fenólica (de las pieles) para extraer al máximo en la primera prensada
- Elaboración y crianza: El mosto se introduce en depósitos de acero inoxidable a temperatura controlada de 17º para conservar sus aromas primarios durante la fermentación. Realizada la fermentación se trasiega a otro depósito conservando la lía fina, y se cierra herméticamente permaneciendo durante dos meses. Sólo se abre una vez a la semana para remover las lías. Se embotella sin ser sometido a ningún tratamiento, tan sólo pasa por una decantación
- Graduación: 13,5%
- Precio aproximado: 8€
- Fecha de cata: 20/06/2018 – Catado en la modalidad Cata-A-Ciegas Panel de Expertos
Apreciación: Al igual que con su hermano blanco, la presentación es muy buena y original, con una etiqueta que recuerda a los dibujos del libro de Lewis Carroll Alicia en el País de las Maravillas.
El vino tiene un bonito color rosado piel de cebolla, muy limpio y brillante .
Se muestra bastante tímido en nariz, en un principio, necesita coger algo de temperatura para expresarse, pero cuando lo hace, despliega un abanico olfativo mucho más amplio de lo que es habitual en un vino rosado. Encontramos notas florales de clavel y geranio, frutos rojos muy limpios, notas cítricas de piel de naranja, sutiles pinceladas vegetales de pimiento rojo maduro y frescura de hierbabuena.
Va creciendo en complejidad con su oxigenación apareciendo notas salinas, toques minerales de polvo y un punto ligeramente ahumado. Se agradece la frescura y la ausencia de golosinas.
En boca tiene una entrada fresca gracias a su buena acidez. Es sabroso, amplio, con empaque y ligeramente untuoso. La estructura es casi de vino tinto.
El sabor es a a fruta roja dulce pero nada empalagosa, debido a unos agradables toques amargos y salinos, de hecho es más sápido que lo que pareciera augurar la nariz.
Valoración global y recomendación de consumo: Es un rosado complejo, mucho más vino que los rosados al uso.
Tiene un equilibrio muy logrado entre su variedad de matices y su frescura, lo que lo convierte en uno de los rosados más gastronómicos que hemos probado.
Pero hay que tener un poquito de paciencia para que se exprese en nariz.
Un vino rosado sobre todo para aquéllos a los que no les gustan los vinos rosados habituales.
©Mara Funes Rivas – Julio 2018