
- Bodega: Finca Viladellops
- Origen: Macizo del Garraf – D.O. Penedès
- Variedad/es: 100% Xarel.lo Vermell
- Elaboración: Selección en viña y mesa de selección. Maceración pre-fermentativa en prensa durante 12 horas a 12ºC. Vinificación en depósitos de acero inoxidable con temperatura controlada a 15ºC. Embotellado (tiraje) con azúcar residual en torno 24g/l. Termina fermentación en botella sin añadir azúcar ni aditivos fermentativos ni clarificantes
- Crianza: Mínimo de 15 meses de crianza en rima en el espumoso ancestral. Elaboración única Ancestral -Brut Nature- (sin adicción de licor de expedición)
- Graduación: 11,5%
- Fecha de cata: Cata a ciegas llevada a cabo el 28 de noviembre de 2022
Información de interés: Las uvas con las que se elabora este vino crecen en suelos calcáreos, con presencia de fósiles marinos y son cultivadas de manera ecológica. Es importante resaltar que la elaboración es muy singular al ser un Ancestral Brut Nature pues no ha recibido licor de expedición
Apreciación: La etiqueta nos habla de una familia y de un nombre, las raíces de la familia que plantó el abuelo Luis Desvalls, cuyo nombre comparten el padre, el hermano y el hijo del elaborador. Sin duda un bonito mensaje.
El vino tiene color amarillo limón con matices verdosos y burbuja elegante y fina.
Se abre con aromas de heno y pan rallado, carne de pera y manzana amarilla frescas, finos amargos de almendra verde, frescura de menta y chispa de anís.
Al abrirse descubre un bouquet de flores blancas y la fruta se hace más intensa: fruta de hueso, fruta blanca madura, confitura de limón y piel de manzana oxidada. Buena intensidad y gran limpieza aromática.
La entrada en boca es fina pero con amplitud. La burbuja tiene un tacto cremoso, sabe a fruta blanca fresca y en contraposición, deja una sensación licorosa.
Es franco y equilibrado, con post-gusto medio-largo y un final elegantemente amargoso que apoya su alta acidez.
Valoración global y recomendación de consumo
El L.D. Ancestral 2019 tiene una nariz elegante que gana en complejidad, y una buena gestión de la oxidación y de los amargos en boca. Es fresco, afrutado, sutil, muy bebible y con un final seco que lo completa a la perfección.
Nos parece un vino que puede tocar una gran variedad de palos gastronómicos: realzará ahumados, marisco y pescados. Perfecto con sopas y cremas y delicioso con arroces y pastas.
En el ámbito internacional es perfecto con la gastronomía francesa elaborada con mantequilla, los quesos y los patés, dará una buena réplica a la cocina asiática, arropará la cocina de Oriente Medio y refrescará el picante de la gastronomía india y mejicana.
Pero con lo que más lo aconsejamos es con menús degustación en los que el chef juegue con su versatilidad aromática y gustativa para enfrentar platos imaginativos.
© Mara Funes Rivas – Diciembre 2022