- Bodega: Bodegas García de Lara
- Origen: Villarubia De Santiago (Toledo) – V.T. Castilla
- Variedad/es: 100% Cencibel (Tempranillo) plantada en 1960 en el paraje del mismo nombre
- Elaboración: Despalillado con estrujado suave. Encubado y maceración en frío durante 4 días. Fermentación alcohólica espontánea con levaduras indígenas en depósitos de acero inoxidable. Fermentación maloláctica en depósitos de acero inoxidable.
- Crianza: Crianza de 12 meses en barricas de roble francés y americano (80%/20%). Afinado en botellero durante 9 meses
- Graduación: 14,5%
- Fecha de cata: Cata a ciegas llevada a cabo el 2/3/2022
Información de interés: La viña de tinto cencibel, de 5,47 ha, se encuentra a 768 metros de altitud y fue plantada en el año 1960 en dos parcelas contiguas. Está cultivada en secano, en un terreno calizo con textura franco limosa. El nombre proviene de la Cueva que se encuentra en la parcela y del color rojizo de la tierra.
Apreciación: El diseño de la etiqueta es sobrio y elegante, busca transmitir y transmite, la seriedad y el clasicismo del vino que contiene.
El vino tiene color rojo picota no excesivamente cubierto, más bien de capa media.
En nariz dibuja un perfil clásico con fruta roja y negra madura (arándanos) y lácteos de yogurt procedentes de su crianza en barrica. Tiene asimismo un corte cálido en el que destacan intensos balsámicos de regaliz negro, pimienta negra, clavo, cacao y canela.
La temperatura y una mayor oxigenación nos trae aromas más complejos, hierba seca, turba, pétalos de flores azules y piel de naranja rallada. Una nariz profunda, perfumada, atractiva y golosa.
La entrada en boca es dulce pero no empalaga. Es amplio y cremoso, con un tanino fino, largura y profundidad, y paso grácil.
Equilibra sabores como el cacao y el eucalipto con los de la fruta negra que lo hacen muy sabroso. Tiene buen peso, una gran frescura para su grado, un tacto agradable y envolvente, final amargoso y retro-gusto largo.
Valoración global y recomendación de consumo
El vino La Cueva Colorá 2019 tiene un perfil de corte clásico que puede gustar a un gran público. De trago fácil y sabroso es perfecto para maridar la variada gastronomía que tenga como base la carne, tanto blanca, como roja, como de caza mayor o menor.
Será también el perfecto acompañante de platos de cuchara y legumbres, un vino con el que es imposible fallar.
© Mara Funes Rivas – Marzo 2022
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