Cerro Gallina Bobal 2015: Elegancia bobal

• Bodega: Cerro Gallina
• D.O./Origen:  D.O. Utiel-Requena (España)
• Variedad: 100% Bobal de viñas viejas (90 años). La viña se cultiva de manera artesanal dirigida a obtener una mínima producción pero una máxima expresión de la fruta. La vendimia es manual
• Elaboración y crianza: Tras una doble selección de granos se procede a una prolongada maceración en depósitos de forma cónica para conseguir una extracción respetuosa de la fruta. El vino permanece durante 18 meses en barricas de roble francés y reposa un mínimo de 9 meses en botella antes de su comercialización
• Graduación: 14,5%
• Precio aproximado: 15€
• Fecha de cata: 13/09/2018 – Catado en la modalidad Cata A Ciegas Panel de Expertos

Información de interés:  El vino se elabora con uvas de pequeño tamaño procedentes de un viñedo de 90 años situado al pie del Cerro Gallina, del que toma el nombre el vino y que está a sólo 3km de la bodega, en la municipalidad de Campo Arcís.

Apreciación: Muestra una presentación moderna y acertada con el contenido. El aspecto del vino es limpio y graso (glicérico) con color rojo y ribete violáceo que le da un aire más juvenil que su edad real.

Tiene una alta intensidad en nariz, en la que destacan unos profundos balsámicos y toques de pimienta negra muy propios de la variedad bobal. Aunque se muestra frutal (fruta negra madura con pinceladas ácidas de fruta roja), el protagonismo es de la crianza en barrica: elegantes pinceladas de cuero fino, especias dulces y ligeros tostados.

Con oxigenación va evolucionando hacia un perfil más complejo en el que aparecen notas perfumadas de violetas y un toque salino. Es un vino que en fase aromática se muestra potente pero pleno de matices y equilibrado.

En boca nos encontramos con un perfil muy parecido a la nariz en la que las notas de su crianza parecen mandar en un primer momento (hoja de tabaco, marroquinería, especias) pero que muy pronto se equilibran con la fruta emergente (roja y negra) lo que demuestra un buen uso de una madera noble. Su alta acidez lo dota de una viva frescura, su tanicidad de estructura. Es amable dentro de su potencia, largo, franco y voluminoso. En sabores combina las notas sabrosas con un toque goloso (que no dulce).

Valoración global y recomendación de consumo: La boca es sin lugar a dudas -y sin desmerecer a la nariz- uno de sus puntos fuertes. Despliega un muy buen punto de maduración de la uva, es elegante, fresco y equilibrado. Su nervio ácido sostiene una buena estructura, está evolucionando muy bien para su edad y tiene vida por delante.

Es armónico, muy versátil y especialmente indicado para la restauración por su equilibrio y abanico de matices, por su perfil clásico pero muy sabroso.

Vino con una distinguida elegancia que muy pocos bobales consiguen.

©Mara Funes Rivas – Septiembre 2018