El Cepón 2020: complejo y elegante, con personalidad propia

  • Bodega: Aníbal de Otero
  • Origen: D.O. Bierzo
  • Variedad/es: 100% Mencía de cepas muy viejas, con una edad media de más de 100 años
  • Elaboración y crianza: Vendimiado a mano en cajas de 18-20 kg, es un vino de estilo libre que realiza una crianza de 20 meses en barricas semi-nuevas de roble francés. Fue embotellado en noviembre del 2023, sin clarificar ni estabilizar
  • Graduación: 15%
  • Fecha de cata: Cata a ciegas llevada a cabo el 29 de febrero de 2024

Información de interés: El total de la uva con la que se elabora este vino proviene de una única parcela: El Cepón, con orientación norte-sur, a 500 msnm y con influencia del clima mediterráneo-continental. La agricultura practicada es ecológica siguiendo métodos tradicionales. Producción muy limitada: sólo 1.000 botellas.


Apreciación: La etiqueta describe en trazos verdes, el paisaje de la parcela de la que procede, de una manera limpia y evocativa.

El vino tiene el color rojo intenso de la picota pura, con reflejos granates y capa media-alta.

En nariz se abre con fruta roja y negra cremosa que con aireación evoluciona hacia la confitura de mora. Destaca la frescura de los balsámicos de monte bajo mentolado y regaliz que se van intensificando hasta llegar a notas cosméticas y de perfumería como el almizcle.

Se suaviza con fragancias de aceites esenciales, pétalos de flor, polvos de talco y turba. Asoma la cera de su crianza unida a notas de alcohol floral bien integrado, tostados golosos de caramelo de café y cereza en licor. Curioso y profundo.

Tiene una entrada en boca potente e intensa, en la que se alterna un alto volumen frutal, con especias picantes, cacao amargo, tabaco de pipa y regaliz negro. Muy sabroso, con los tostados de una crianza en barrica bien integrada.

Tiene un tacto envolvente, paso estructurado, corpulento y voluminoso, y mucha largura. Un vino con raza.

Valoración global y recomendación de consumo

El Cepón 2020 es un vino clásico en boca y muy interesante en nariz. Con indudable potencial, elegante y personalidad propia .

Los mejores cortes de las carnes rojas sin duda se van a ver realzados por este vino, en especial si tan sólo se elaboran con un golpe de plancha o de parrilla. Su personalidad boscosa le permite acompañar con elegancia platos de caza mayor y estofados, pero no nos olvidemos de platos tradicionales como el botillo berciano, la fabada asturiana o un cocido montañés.

Recomendamos reservar una copa para disfrutarlo al final de la comida con una selección de quesos curados y semi-curados.

© Mara Funes Rivas – Marzo 2024


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