- Bodega: Zugober Belezos
- D.O./Origen: Rioja
- Variedad: 100% Tempranillo de más de 50 años
- Elaboración: Fermenta en depósitos de acero inoxidable.
- Crianza: La fermentación maloláctica la hace en bocoys de 600 lt de roble francés donde permanece reposando 21 meses
- Graduación: 15º
- Precio aproximado en tienda: 30€
- Fecha de cata: Cata a ciegas llevada a cabo el 28/05/2019
Información de interés. El vino procede de un viñedo único plantado hace 50 de nombre igual que el vino: Sierra Carbón. Tras ser embotellado reposa un mínimo de 6 meses antes de ser comercializado
Apreciación: La etiqueta tiene un diseño elegante que juega con la idea del carbón y su combustión, enlazando con el nombre del viñedo y el vino. Presentación muy acorde con el vino.
El vino tiene color rojo picota madura con gran brillo y limpieza
En nariz se arranca fresco y potente con abundante fruta negra en sazón (moras). Las notas de su crianza en madera están claras pero son elegantes, con variedad de especias, balsámicos mentolados y de regaliz y pinceladas lácteas.
El bosque y los matorrales están muy presentes en la nariz, aportando notas silvestres de de montebajo muy bien complementadas con la suavidad de la marroquinería fina.
Curiosamente sin embargo, la potencia aromática no se traslada a la boca en su totalidad. Tiene una entrada muy elegante con un paso liviano y muy fresco, en absoluto pesado.
La madera está muy bien integrada, tiene buena acidez, largura y persistencia. El sabor es a fruta madura con chispas de hierbas aromáticas aderezadas con pinceladas de yogurt.
Muy equilibrado.
Valoración global y recomendación de consumo: Pese a ser un vino con entidad y estructura, no resulta pesado ni excesivamente potente en ningún momento.
Es un vino muy elegante y ya muy bebible, pero con una larga vida por delante y sobre todo, con una increíble capacidad de hacer disfrutar a quien lo consuma.
© Mara Funes Rivas – Junio 2019
VinObjetivo 
Entra alegremente suave, fresco y elegante dejando una fragancia a fruta madura en nariz en su retrogusto nasal. Recuerda el frescor en la piel que produce el viento de un atardecer eterno de primavera en lo más alto de la Rioja Alavesa observando el verde de los viñedos que se alinean en cuadrícula desordenadas hasta llegar a la Sierra Cántabra. Alegra el espiritu y nos transmite paz, armonía y felicidad.
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Gracias por el viaje…
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